Viaje Etiopia

Viaje a Etiopía

LA CEREMONIA DEL CAFÉ

En la Djäbäna Buna o ceremonia del café, en Etiopia, la primera taza que sale de los granos de café se conoce como Abol. Es la más importante, la que tiene un sabor más fuerte, con más aroma y un cuerpo más complejo. Si los presentes están reunidos para resolver un problema, esta taza simboliza el conflicto, la reflexión sobre ello y el diálogo entre las partes. Todos los que beben deben ceder para tratar de ver la perspectiva del otro, o para respetar a quien tienen al lado. Es también una taza para socializar y mostrar respeto hacia el invitado y el anfitrión.

La segunda taza, ya más suave, es la Tona. Se añade agua a la infusión pero sigue siendo un café cargado de aromas y sabor. Es el momento de alcanzar una solución, una resolución al problema presentado o, simplemente, una conclusión al asunto del día. Solo entonces se puede pasar a degustar la tercera y última taza. Normalmente se sirven pequeños bocados salados como semillas, palomitas de maíz o frutos secos para acompañar.

El final de la ceremonia se materializa en esa tercera taza de café, mucho más ligero, llamado Baraka. Por ser tan suave simboliza la aceptación del otro y la alegría y armonía del momento compartido. Es un trago alegre al que se suele invitar a participar a los más jóvenes y niños que todavía no participan de la ceremonia completa. Simboliza el sentimiento de comunidad y la identidad común del grupo.